La madrugada del 31 de octubre de 2025 terminó en tragedia para el joven estudiante de séptimo semestre de Ingeniería de Sistemas de la Universidad de los Andes, Jaime Esteban Moreno Jaramillo, de 20 años, quien luego de asistir a una fiesta de disfraces en la capital fue víctima de una agresión brutal que le causó un trauma craneoencefálico severo y, finalmente, la muerte.
Las autoridades, en conjunto con la Fiscalía General de la Nación y la Policía de la localidad de Barrios Unidos en Bogotá, han abierto una investigación por homicidio agravado. Hasta ahora ha sido legalizada la captura de al menos una persona —el joven Juan Carlos Suárez Ortiz, de 27 años— y se identificaron otras dos mujeres implicadas, quienes fueron dejadas en libertad por falta de pruebas.
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Los hechos
Según la reconstrucción oficial, Moreno asistió el jueves 30 de octubre a una fiesta de disfraces organizada en un local nocturno identificado como Before Club, ubicado en la calle 64 con carrera 15, al norte de Bogotá.
A la salida del establecimiento, aproximadamente a las 3:25 a.m., fue interceptado por un grupo de personas disfrazadas. Testigos relatan que una mujer señalaba a Moreno y gritaba “era él, ese era el de la discoteca”, mientras los agresores —al menos dos hombres— lo atacaron con puñetazos y patadas, principalmente en la cara y el cuerpo.
El joven cayó inconsciente en la vía pública y fue trasladado primero al CAMI de Chapinero, luego al Hospital Simón Bolívar, donde ingresó a la UCI por el diagnóstico de “trauma craneoencefálico severo” y “sangrado profuso por nariz y boca”. Pese a los esfuerzos médicos sufrió paro cardiorrespiratorio y murió esa misma noche.
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Investigación y capturas
La Fiscalía asignó el caso como homicidio agravado ante la gravedad de las lesiones y la muerte de la víctima. En audiencia ante un juez de control de garantías se legalizó la detención de Juan Carlos Suárez Ortiz, a quien se le atribuye participación directa en la agresión.
Las otras dos personas inicialmente capturadas —identificadas como Kaleidymar Paola Fernández Sulbarán y Bertha Parra Torres— quedaron en libertad por falta de pruebas.
Una de las líneas de la defensa plantea que la agresión fue consecuencia de una supuesta “conducta impropia” del joven hacia una mujer del grupo agresor, argumento que la familia y su abogado califican de infundado y “ruin”.
Las autoridades revisan imágenes de cámaras de seguridad de la zona y del bar, así como testimonios clave de testigos que acompañaban a la víctima.
Víctima, contexto y repercusiones
Moreno Jaramillo era un estudiante destacado, miembro de la selección universitaria de ajedrez, apasionado por la programación y con un futuro prometedor por delante.
Su familia lo describe como “el hermano que todo el mundo debería haber tenido”.
La Universidad de los Andes lamentó la pérdida, activó acompañamiento psicológico para estudiantes y personal y pidió el esclarecimiento íntegro de los hechos.
En Bogotá y en redes sociales el caso ha generado una fuerte indignación, en especial porque se produce en vísperas de Halloween, y por el eco que remite al caso Luis Andrés Colmenares ocurrido en 2010, también en la misma fecha y con estudiante de la misma universidad.
La cantante y congresista socializó el llamado a reforzar la vigilancia y control en locales nocturnos y entornos de acceso público en horas de alta vulnerabilidad.